- Presumir todo el tiempo en tus tweets.
- Tuitear muchas veces lo mismo. Hacer spam del mismo link o información para captar atención.
- Hablar en otro idioma todo el tiempo. Si tus seguidores hablan en español, ¿por qué tuitear en inglés?
- Hablar de tu ubicación solo cuando te conviene, solo para impresionar u omitiendo detalles.
- Criticar todo el tiempo a todo lo que pase por tus ojos y tuitearlo inmediatamente.
- Maldecir a cada rato y/o hablar mal de cualquier religión.
- Insultar todo el tiempo, decir groserías y buscar pelea.
- Vivir amargado todo el tiempo y twittear tus malos momentos todo el tiempo. Nadie quiere malas energías en su línea de tiempo.
- No responder a alguna pregunta o a cualquier comentario que haga algún usuario con tu arroba. Es chocante ignorar a tus seguidores, te hace quedar como la estrellita.
- No seguir a nadie y exigir que todo el mundo te siga. Está bien ser exclusivo, pero es muy chocante ver que alguien que sigue a 2 personas nada más.
Por cierto, síguenos en @LaCarcachita
Fuente: Fanultra.posterous.com
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